Cómo se celebraba el día de los muertos en Mendoza
Entre fines del siglo XIX y principios del XX, la población mendocina celebraba cada 2 de noviembre el Día de los Muertos. Los familiares y deudos asistían a los cementerios para homenajear la memoria de sus difuntos. Este espacio se convertía en una verdadera romería de carruajes y peatones de todas las edades, sexos y nacionalidades. Las mujeres asistían enlutadas con la típica “alfombrita”. Allí, ante la tumba de los muertos queridos, recitaban las plegarías cristianas, junto a la vacilante llama de las bujías, y dejaban pruebas de cariño que consistían en ramos y coronas de diversas formas, dimensiones y materiales.